¿Cómo debes organizar tus productos de belleza?.

Si normalmente tienes un desastre con tus productos de belleza, ordenarlos de manera correcta puede ser una opción para evitar que los cosméticos se te echen a perder (sin haberlos aprovechado). Y sí, probablemente es cuesta arriba y estresante con solo pensar en que tienes que hacerlo, pero aquí te decimos cómo organizar los productos de belleza de la manera más eficiente para que valga la pena tu inversión en productos.

Separa por categorías.

Lo primero que tienes que hacer es dividir tus productos de pelo, de rostro, de maquillaje y de cuerpo. Una vez que tengas un apartado de cada uno, te recomendamos separar por sub-categorías. Por ejemplo, hablando de skincare, aparta las cremas en un espacio, los sueros en otro y así con cada clase de producto. Harás lo mismo con el maquillaje: una sección con sombras, otra con bases, una más con polvos, etc.

Revisa las fechas de caducidad.

Ahora, revisa la fecha de caducidad de cada producto, buscando un ícono que suele tener un envase abierto con números en su parte inferior. El número indica los meses de uso después de haberlo abierto. 

Limpieza profunda.

Antes de llegar al siguiente paso, es importante que limpies las superficies de cada producto con toallitas o soluciones desinfectantes. Este proceso lo debes hacer al menos una vez, cada dos semanas, para evitar la formación de bacterias y microbios e impedir que estas tengan contacto con el cutis.

Ordena con estrategia.

Ahora sí, llegó la parte más divertida que consiste en acomodar cada subcategoría en organizadores. Hasta el frente, pondrás los productos próximos a vencer y atrás, los que has abierto recientemente o los que aún están en caja. En el caso de los productos de maquillaje, haz lo mismo, pero también pon hasta adelante aquellas piezas que te harán salir de tu zona de confort. Por ejemplo, delineadores de colores que jamás usas, bases con texturas únicas o paletas de sombras que a veces no quieres ni tocar. 

Deja ir.

En esta parte de ordenar, tienes que ser muy sincera con esos productos nuevos que no te encantan o que solo probaste una vez. Si sabes que realmente no los usarás, es  mejor regalarlos. Aprender a soltar es un ejercicio importante en la vida que debes comenzar a aplicar en pequeñas acciones como estas.