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La permanencia en el tiempo de un negocio depende principalmente de la atención que se le brinde a los clientes, ya que son la fuente de ingreso del mismo. Para que el negocio funcione y tenga éxito el equipo de ventas debe tener estas cualidades:
1) Actuar con cortesía y amabilidad: Inicia la experiencia de venta con una sonrisa, procura ser cortés y siempre mostrar amabilidad, hasta en el momento que debas decir “no” (No hay, no lo vendo, no lo hago). Se amable así sea para exigir respeto por tu trabajo, y no dejes de ser amable porque no sea recíproco. Ser amable siempre se convierte en hábito, esto hace más factible tener clientes satisfechos.
2) Tener pleno conocimiento del producto y/o servicio: Se debe conocer cada detalle del producto o servicio que se ofrece. Pueden surgir diferentes situaciones y preguntas y poder ayudar en dichas inquietudes tiene como desenlace un cliente más. Si bien cada integrante del equipo de trabajo debe cumplir diferentes roles, es imperativo que también tenga el conocimiento necesario para poder aclarar dudas y explicar los beneficios del servicio que ofrecen.
3) Voluntad para resolver problemas: Ante cualquier queja, se debe estar dispuesto a buscar una solución y asumir el error de ser necesario. Corregir y asumir la falla es una buena forma de no perder clientela. Siempre se debe actuar con la plena intención de solventar el problema, la queja o la duda del cliente. En estos casos la amabilidad debe estar siempre presente.
4) Pulir la habilidad de escucha y paciencia: Cada experiencia de venta y de interacción con un cliente se debe aprovechar para obtener la información necesaria que ayude a la mejora de procesos, producto o de la experiencia de venta que se busca ofrecer. La escucha desde la comprensión, puede dar muchos datos relevantes que serán de gran ayuda para el éxito del negocio.
5) La credibilidad: Mientras más claro y preciso se sea durante la experiencia de venta, hará que todo fluya y culmine con éxito. Procurar tener las respuestas acertadas a las dudas del cliente, siempre con la premisa de mostrar las ventajas o posibles desventajas, hará que el cliente crea y además pueda referir a otros y así incrementar tus ventas.
6) Guiar al cliente: Es importante el acompañamiento en todo momento del proceso. Se debe estar atento en la precompra, por ejemplo dejar en claro los métodos de pago, es una manera. Durante la compra, instruir al cliente en el uso adecuado de la tabla de talle, es otro ejemplo. Y es la postcompra, ofrecer cambio de tallas o guiar en el uso adecuado del producto. Lograr satisfactoriamente este proceso hará un cliente satisfecho que volverá en un futuro y hablará de esa buena experiencia.
