Como elegir la base ideal para tu rostro.

Saber cuál es el tono y la textura adecuados para nuestro tipo de piel puede generar muchas preguntas. Una regla general fundamental dice que siempre es mejor pecar por defecto que por exceso. Dicho esto, es mejor comprar una base más clara que una más oscura, porque siempre puedes usar polvos bronceadores para realzar el tono. Pero como queremos elegirlo como un profesional, aquí tienes la guía definitiva para aprender a hacerlo.

Las firmas de maquillaje han aumentado considerablemente la gama de una amplia variedad de tonos. En general, se recomienda elegir siempre el tono que sea más relevante para nuestro tono de piel natural. Para averiguar cuál es ese tono, puedes poner en práctica este truco: prueba tres tonos que sean similares a la piel en la zona de la mandíbula. El que sea más compatible con nuestra piel (siempre uno de los tres más parecidos) debe ser el de elección. También es importante realizar estas pruebas con luz natural.

A la hora de elegir, también es importante tener en cuenta la pigmentación de nuestra piel. No se trata solo de colores claros u oscuros, sino que también depende de si suele ser neutro, rosa u dorado. Todos ellos están relacionados con nuestro “subtono”. Para saber cuál es nuestro “subtono”, se aconseja seguir este truco: ponerse frente al espejo al lado de un folio blanco y observar qué color muestra la piel en comparación con ese folio: 

1. Si la piel se ve más amarilla, tiene un tono cálido, así que elija un tono dorado o beige.
2. Si se compara con el blanco del portafolio, la piel se ve más rosada, que es un tono frío, por lo que el “subtono” debería ser más rosado. 
3. Si la piel no se destaca debido al amarillo o al rosa, este es un tono neutro y el tono debe ser lo más neutro posible.

Nuestro tipo de piel determinará también el tipo de base elegir y es importante usar el más adecuado en cada caso.

• Para pieles grasas es preferible elegir bases de acabado aterciopelado (preferiblemente oil free). No necesariamente tienen que ser bases compactas, pero es recomendable que tengan un acabado ligeramente empolvado y matificante. Los bases de maquillaje en barra pueden ser una buena opción.
• Las pieles normales y secas pueden optar por bases más líquidas y fluidas con acabados jugosos.

La elección de la textura de la base no solo viene determinada por el tipo de piel que tengamos, sino también por el resultado que busquemos. La regla parece fácil: cobertura total para las que quieren un efecto más cubriente. Y ligera y natural para las que quieren que sea un efecto natural de la piel, tal y como es. El acabado también vendrá determinado por los productos que se usen antes de la base. El uso de prebases iluminadoras, matificantes y productos con efecto filtro, también determinaran el resultado.