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Se trata del yate “Dilbar”, el más grande del mundo, de 156 metros de eslora y un valor estimado en unos 600 millones de dólares según la revista Forbes.Alemania confiscó oficialmente el jueves (14.04.2022) el yate más grande del mundo, propiedad del oligarca ruso Alisher Usmanov, en el marco de las sanciones contra Moscú por la guerra en Ucrania, según una fuente policial.
El yate “Dilbar”, de 156 metros de eslora y un valor estimado en unos 600 millones de dólares (según la revista Forbes) estaba siendo reparado en Hamburgo desde octubre de 2021.
Las aduanas alemanas llevaban varias semanas investigando a su propietario ya que este se escondía detrás de sociedades en paraísos fiscales.
Pero “tras largas investigaciones”, la policía judicial alemana logró identificar a su dueño, la hermana de Alisher Usmanov, Gulbajor Ismailova, que también estaba en el punto de mira de las sanciones europeas.
Su hermano, de 68 años, figuró en 2021 como la sexta persona más rica del Reino Unido, según el Sunday Times.
Decenas de yates de oligarcas rusos fueron decomisados a raíz de las sanciones occidentales.
Por su parte, el gobierno francés informó que ha congelado 33 propiedades en la Costa Azul, París y otros lugares, pertenecientes a oligarcas rusos sancionados por la invasión a Ucrania.
El Ministerio de Finanzas publicó una lista actualizada de las citadas propiedades rusas en Francia, incluyendo un castillo de lujo con vistas al Mediterráneo en el Cabo de Antibes, que supuestamente pertenecía al multimillonario ruso sancionado Roman Abramovich.
En conjunto, se calcula que las 33 propiedades tienen un valor de más de 500 millones de euros. A diferencia de los bienes embargados o confiscados, las propiedades congeladas siguen perteneciendo a sus propietarios y pueden seguir habitándolas, pero no pueden venderse ni alquilarse.
El valor total de los activos rusos congelados o confiscados en Francia se acerca a los 24.000 millones de euros.
gs (afp, ap)
