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El observatorio «Urnas Abiertas» registró 120 hechos de violencia política durante el mes de octubre: «asedios, hostigamiento policial y parapolicial, citatorios y detenciones durante horas o días».El observatorio multidisciplinario Urnas Abiertas reportó el viernes (05.11.2021) un total de 1.656 hechos de violencia política ocurridos en Nicaragua durante el proceso electoral, que culminará con los comicios generales de este domingo en los que el presidente Daniel Ortega busca su tercera reelección.
«A un año de monitoreo, hemos registrado 1.656 hechos de violencia política hasta el 31 de octubre de 2021. Durante el mes de octubre de 2021 se observó un incremento de violencia política, a través de asedios focalizados, hostigamiento, citatorias y amenazas», señaló Urnas Abiertas, un organismo que da seguimiento al proceso electoral.
Según el observatorio, solo en octubre pasado se registraron 120 hechos de violencia política, principalmente ejercidos por autoridades e instituciones estatales y «paraestatales». Entre estos mencionan «asedios focalizados que duran algunos días e incluyen hostigamiento policial y parapolicial, citatorios por la Policía o al Ministerio Público, y detenciones durante horas o hasta días».
«Durante el período que dura la detención, las personas son sometidas a interrogatorios y reciben amenazas de ser criminalizados por la Ley de Ciberdelitos y por delitos electorales», señaló.
Las elecciones se desarrollan en medio de una crisis sociopolítica que inició en 2018. Ortega, que ya gobernó de 1979 a 1990 y recuperó el poder en 2007, busca su tercera reelección seguida, para un cuarto mandato de cinco años y el segundo con su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta.
La oposición y diversos países han rechazado dichas elecciones porque las consideran «fraudulentas» y por su falta de legitimidad, al celebrarse con siete opositores que aspiraban a ser candidatos presidenciales encarcelados, y sin la observación de la OEA ni la Unión Europea (UE).
Exposición denuncia la represión de 2018
Mientras, en Costa Rica, el Museo de la Memoria «Ama y no olvida» se instaló para denunciar la detención de opositores en Nicaragua y rendir homenaje a quienes fueron asesinados en 2018 por policías y fuerzas paramilitares.
También en el Parlamento en San José se instaló esta semana una réplica de una celda de la cárcel de El Chipote de Managua, donde permanecen detenidos desde junio una treintena de opositores, acusados de conspirar contra el presidente, bajo leyes aprobadas por el oficialismo.
«Lo que queremos es que nos dejen en libertad», dijo el músico Luis Enrique Mejía Godoy, defensor de la revolución sandinista que derrocó a la dictadura de Somoza en 1979, pero crítico de la permanencia de Ortega en el poder. El artista, exiliado en Costa Rica, dio por descontado que Ortega saldrá reelegido este domingo, en lo que considera una «farsa electoral».
gs (efe, La Prensa, ap, afp)
