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Xabi Alonso y su elenco aterrizan en la jornada trece de Bundesliga con la misión de refrendar el buen ritmo que tenían olvidado.El vigente campeón de la Bundesliga había dejado la vara muy alta luego de coronarse sin conocer la derrota la temporada pasada. Esa hazaña quedó inscrita con letras doradas en la historia del fútbol alemán. Hoy, sin embargo, despojados del halo de invicto luego de un inicio de curso irregular, la misión de Xabi Alonso, timón del Bayer Leverkusen, es mantener las revoluciones sin perder de vista la cima.
Efervescente triunfo
Es verdad que el equipo parece haber recuperado el ritmo tras encadenar cuatro victorias, la última de ellas en la Allianz Arena que significó la eliminación del Bayern Múnich de la Copa Alemana, título que aún le pertenece a las «aspirinas”. Más importante es el golpe de autoridad que acarrea dicho triunfo a domicilio ante el multicampeón bávaro, que, a propósito de invictos, marchaba imbatible en la escena nacional.
«Es una noche muy importante para nosotros. Ganar aquí contra el Bayern, que ha estado muy fuerte esta temporada, es especial. Tuvimos que sufrir. Pero logramos nuestro objetivo», dijo el español Xabi Alonso sobre un partido cuya particularidad fue la tarjeta roja sobre el arquero bávaro Manuel Neuer al minuto 17, la primera de toda su carrera en más de 850 partidos.
Incluso es llamativo que la palabra «invicto” acompaña a Xabi Alonso en este tipo de enfrentamientos: desde que llegó a la Bundesliga, el español ha esquivado el descalabro en cinco partidos ante el Bayern Múnich, actual líder de la Bundesliga y alejado por siete puntos del Leverkusen ubicado en la posición tres por encima del irreconocible RB Leipzig. Este sábado, la remontada continuará contra el St. Pauli en la jornada trece del campeonato.
¿Wirtz-dependencia?
Con lo demandante del calendario multicompetencia al estar en la batalla por la Champions League, Copa Alemana y Bundesliga, las implicaciones físicas han cobrado factura en el Leverkusen. Alonso ha tenido que lidiar con una cascada de lesiones en su sector ofensivo: Amine Adli, Jonas Hofmann, Victor Boniface y Patrik Schick dejaban al equipo con la pólvora mojada.
Las «aspirinas”, no obstante, han encontrado en Florian Wirtz al jugador capaz de echarse el equipo al hombro. A sus 21 años, el internacional alemán le pone el pecho a las balas desde el mediocampo con clase, potencia y entrega. La nueva estrella mundial del fútbol se robó los reflectores en el partido de Copa contra el Bayern Múnich.
En Bundesliga, Wirtz suma cuatro goles y la misma cantidad de asistencias. En Champions League también da la talla: cinco goles en cinco partidos, en cuatro de ellos fue el jugador del partido. A este ritmo, el Leverkusen tendrá que cuidarse de caer en la dependencia que de a poco va creciendo. Ya lo decía Toni Kroos recientemente en torno a Jamal Musiala en el Bayern Múnich, cuando señalaba que el equipo es «extremadamente dependiente” del talento del seleccionado alemán.
Se sabe también que Wirtz es pretendido por los más grandes. La pregunta es si le alcanzará a Alonso, y al propio Wirtz, la estadía en Leverkusen para repetir la hazaña de la que fuimos testigos en mayo de este año.
(aa)
