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Análisis estadístico en el estudio de la historia: según los científicos, las acciones imprevisibles individuales podrían producir patrones predecibles de comportamiento colectivo que pueden investigarse matemáticamente.Solo el 24,8% de los 69 hombres que gobernaron el Imperio Romano de Occidente desde el año 63 a.C. hasta el 395 d.C. murieron por causas naturales. El resto tuvo una muerte violenta en el campo de batalla o en complots palaciegos, según han determinado los científicos en un estudio publicado en el Royal Society Open Science.
Los científicos de datos del Instituto de Ciencias Matemáticas e Informáticas de la Universidad de São Paulo (ICMC-USP), en São Carlos (estado de São Paulo, Brasil), han identificado ahora un nuevo patrón matemático y determinaron que la regla del 80/20 está asociada a las muertes de los gobernantes romanos, ya que eran más propensos a morir por causas no naturales.
«Aunque parezcan aleatorias, las distribuciones de probabilidades en forma de ley potencial se encuentran en muchos otros fenómenos asociados a sistemas complejos, como el tamaño de los cráteres lunares, la magnitud de los terremotos, la frecuencia de las palabras en los textos, el valor de mercado de las empresas e incluso el número de ‘seguidores’ que tiene la gente en las redes sociales», afirma el científico de datos Francisco Rodrigues, de la Universidad de São Paulo, y señala que los propios reinados de los césares son uno de esos contextos.
El principio de Pareto
Según Rodrigues, la distribución de la ley potencial o ley de potencias que generalmente define la longevidad de los emperadores romanos es lo que se llama el principio de Pareto, también conocido como la regla del 80/20. Esto significa que en todos estos casos la probabilidad de un suceso común es de aproximadamente el 80 % y la de un suceso raro es de aproximadamente el 20 %, según explican en un comunicado de prensa.
Por ejemplo, el 80 % de los cráteres lunares son relativamente pequeños, mientras que el 20% son realmente grandes. En las redes sociales, el 80% de los usuarios tienen como mucho unas decenas de seguidores, mientras que el 20 % tienen miles o incluso millones. En el caso de los emperadores romanos, según el comunicado, el acontecimiento raro no era ser asesinado.
Por otra parte, si se tienen en cuenta los reinados de los 175 emperadores romanos desde Augusto (63 a.C.-19 d.C.) hasta Constantino XI (1405-53), incluyendo el Imperio de Oriente o Bizantino tras la escisión de 395 d.C., pero excluyendo a los que no gobernaron por derecho propio por ser menores durante las regencias o coemperadores, las cosas no fueron mucho mejor. Cada gobernante solo tenía un 30 % de posibilidades de llegar a una edad avanzada (y de no ser asesinado antes).
Descenso de la curva de supervivencia
Los científicos también determinaron que algunos años fueron más peligrosos que otros. «Cuando analizamos el tiempo que transcurría hasta la muerte de cada emperador, descubrimos que el riesgo era alto cuando el emperador subía al trono», explicó Rodrigues. «Esto podría tener que ver con las dificultades y exigencias del cargo y la falta de experiencia política del nuevo emperador. El riesgo disminuye sistemáticamente hasta que el emperador ha reinado durante 13 años. A partir de ese momento, vuelve a aumentar bruscamente», agregó.
Según los científicos, si la regla del 80/20 es un patrón bien conocido, el fuerte descenso de la curva de supervivencia en torno al año 13 es un hallazgo novedoso. No obstante, el cambio a los 13 años es una pregunta que aún no tiene respuesta.
«Puede ser que tras el ciclo de 13 años los rivales del emperador concluyeran que era improbable que ascendieran al trono por medios naturales», dice Rodrigues. «Tal vez sus antiguos enemigos se reagruparon, o pueden haber surgido nuevos rivales».
Aun así, el trabajo muestra que el análisis estadístico puede ser un importante recurso complementario en el estudio de los fenómenos históricos. «Las formaciones históricas son sistemas complejos en los que los actores interactúan, colaboran y compiten por el poder y los recursos. Las acciones imprevisibles de los individuos pueden producir patrones predecibles de comportamiento colectivo que pueden investigarse matemáticamente», dijo Rodrigues.
Editado por Felipe Espinosa Wang.Análisis estadístico en el estudio de la historia: según los científicos, las acciones imprevisibles individuales podrían producir patrones predecibles de comportamiento colectivo que pueden investigarse matemáticamente.Solo el 24,8% de los 69 hombres que gobernaron el Imperio Romano de Occidente desde el año 63 a.C. hasta el 395 d.C. murieron por causas naturales. El resto tuvo una muerte violenta en el campo de batalla o en complots palaciegos, según han determinado los científicos en un estudio publicado en el Royal Society Open Science.
Los científicos de datos del Instituto de Ciencias Matemáticas e Informáticas de la Universidad de São Paulo (ICMC-USP), en São Carlos (estado de São Paulo, Brasil), han identificado ahora un nuevo patrón matemático y determinaron que la regla del 80/20 está asociada a las muertes de los gobernantes romanos, ya que eran más propensos a morir por causas no naturales.
«Aunque parezcan aleatorias, las distribuciones de probabilidades en forma de ley potencial se encuentran en muchos otros fenómenos asociados a sistemas complejos, como el tamaño de los cráteres lunares, la magnitud de los terremotos, la frecuencia de las palabras en los textos, el valor de mercado de las empresas e incluso el número de ‘seguidores’ que tiene la gente en las redes sociales», afirma el científico de datos Francisco Rodrigues, de la Universidad de São Paulo, y señala que los propios reinados de los césares son uno de esos contextos.
El principio de Pareto
Según Rodrigues, la distribución de la ley potencial o ley de potencias que generalmente define la longevidad de los emperadores romanos es lo que se llama el principio de Pareto, también conocido como la regla del 80/20. Esto significa que en todos estos casos la probabilidad de un suceso común es de aproximadamente el 80 % y la de un suceso raro es de aproximadamente el 20 %, según explican en un comunicado de prensa.
Por ejemplo, el 80 % de los cráteres lunares son relativamente pequeños, mientras que el 20% son realmente grandes. En las redes sociales, el 80% de los usuarios tienen como mucho unas decenas de seguidores, mientras que el 20 % tienen miles o incluso millones. En el caso de los emperadores romanos, según el comunicado, el acontecimiento raro no era ser asesinado.
Por otra parte, si se tienen en cuenta los reinados de los 175 emperadores romanos desde Augusto (63 a.C.-19 d.C.) hasta Constantino XI (1405-53), incluyendo el Imperio de Oriente o Bizantino tras la escisión de 395 d.C., pero excluyendo a los que no gobernaron por derecho propio por ser menores durante las regencias o coemperadores, las cosas no fueron mucho mejor. Cada gobernante solo tenía un 30 % de posibilidades de llegar a una edad avanzada (y de no ser asesinado antes).
Descenso de la curva de supervivencia
Los científicos también determinaron que algunos años fueron más peligrosos que otros. «Cuando analizamos el tiempo que transcurría hasta la muerte de cada emperador, descubrimos que el riesgo era alto cuando el emperador subía al trono», explicó Rodrigues. «Esto podría tener que ver con las dificultades y exigencias del cargo y la falta de experiencia política del nuevo emperador. El riesgo disminuye sistemáticamente hasta que el emperador ha reinado durante 13 años. A partir de ese momento, vuelve a aumentar bruscamente», agregó.
Según los científicos, si la regla del 80/20 es un patrón bien conocido, el fuerte descenso de la curva de supervivencia en torno al año 13 es un hallazgo novedoso. No obstante, el cambio a los 13 años es una pregunta que aún no tiene respuesta.
«Puede ser que tras el ciclo de 13 años los rivales del emperador concluyeran que era improbable que ascendieran al trono por medios naturales», dice Rodrigues. «Tal vez sus antiguos enemigos se reagruparon, o pueden haber surgido nuevos rivales».
Aun así, el trabajo muestra que el análisis estadístico puede ser un importante recurso complementario en el estudio de los fenómenos históricos. «Las formaciones históricas son sistemas complejos en los que los actores interactúan, colaboran y compiten por el poder y los recursos. Las acciones imprevisibles de los individuos pueden producir patrones predecibles de comportamiento colectivo que pueden investigarse matemáticamente», dijo Rodrigues.
Editado por Felipe Espinosa Wang.ACTUALIDAD | DW