Noticias en Español de todo el mundo

Martin Walser: uno de los grandes de la literatura alemana

0 163

Con el combativo escritor, la literatura alemana perdió a uno de sus grandes y más productivos autores de la posguerra.Para Martin Walser, la vida significaba sobre todo escribir. Permaneció fiel a sí mismo hasta su muerte, como un novelista diligente y productivo que también buscaba reconocimiento. Con numerosas novelas, cuentos y obras de teatro, deja tras de sí una enorme obra. Su beligerancia, con la que intervino de vez en cuando en los debates sociales, no se olvida.

El fracaso en la vida: este era el motivo recurrente de Walser. Sus héroes no están a la altura de las demandas que les imponen quienes los rodean. O no están a la altura de sus propias demandas y libran batallas internas. El patrón se puede encontrar en muchas de sus novelas: la trama externa se convierte en un asunto menor.

El escritor por lo tanto se unió a la falange de importantes escritores alemanes de la posguerra, junto con Heinrich Böll, Günther Grass y Siegfried Lenz. Esto también permitió adentrarse en su alma de autor siempre inquieta.

El literato del lago de Constanza

Walser fue el escritor del lago de Constanza. Provenía de una familia católica comerciante de carbón y restaurantes de Wasserburg, cerca de Lindau. Pronto volvió a los campos de su juventud. Muchas de sus historias tienen lugar en la provincia de Suabia.

El mundo de sus novelas era superficialmente pueblerino y provincial y por lo tanto representativo de la sociedad de posguerra de Alemania Occidental. Sus libros mostraban a los lectores las mentiras de la burguesía alemana.

Al mismo tiempo, todo un cosmos de experiencias humanas se reflejó en el aparente idilio de la provincia. Para Walser, escribir era una forma de apropiarse del mundo. “Escribo”, confesó una vez en una entrevista, “luego existo”.

Maestro de la pequeña forma literaria

Walser escribió mucho, casi todos los años un libro: su primera novela Ehen in Philippsburg (Matrimonio en Philippsburg, 1957), en la que se burló alegremente de la sociedad del milagro económico de Alemania Occidental, fue seguida por muchas obras.

Walser consiguió un éxito de ventas inesperado con la novela Ein fliehendes Pferd (Caballo em fuga, 1978), justo cuando era un maestro de la forma breve.

Asimismo, escribió novelas como Half Time (Medio tiempo, 1960), Jenseits der Liebe (Más allá del amor, 1976) y Seelenarbeit (1979), cuyos protagonistas, los empleados Zürn, Kristlein y Horn, libraron sus luchas internas y al mismo tiempo cuenta sobre la Alemania Occidental de los años 60 y 70.

Walser también escribió una novela de reunificación Die Verteidigung der Kindheit (La defensa de la infancia, 1991) y las memorias autobiográficas Una fuente inagotable (1998), probablemente el libro más importante de su obra tardía.

Posiciones vulnerables

Walser odiaba a los críticos, especialmente aquellos que no apreciaban su trabajo. Vio la punta de lanza de este frente de críticos en el “papa de la literatura” de Alemania, Marcel Reich-Ranicki (1920-2013), el influyente jefe de literatura del Frankfurter Allgemeine Zeitung (FAZ), quien reconoció su diligencia pero al mismo tiempo su falta de imaginación. Walser quería vengarse de él y otros en su novela La muerte de un crítico (2002). Esto divirtió a la escena literaria, pero se devolvió a Walser como un búmeran y fue acusado de antisemitismo.

Walser se hizo más vulnerable a través de sus discursos politicos que con su trabajo literario. Su discurso de aceptación en la presentación del Premio de la Paz de la Asociación de Libreros Alemanes en la iglesia Paul de Frankfurt en 1998 fue su perdición.

Criticó que los alemanes siempre se mantuvieran a la altura de su pasado nacionalsocialista, que a la larga no ayuda a mantener este momento cruel en la memoria crítica, según él, pero alienta a las personas a mirar hacia otro lado. Como resultado, existía el peligro de que Auschwitz degenerara en un simple “club moral”.

Primeros pasos como periodista

Walser nació el 24 de marzo de 1927 en Wasserburg, en el lago de Constanza. Poco después del final de la Segunda Guerra Mundial, en los últimos días de la cual era un soldado muy joven, comenzó a estudiar literatura, filosofía e historia en Ratisbona, en 1946.

Cuando aún era estudiante, Walser trabajó como reportero para el entonces recién fundado Süddeutscher Rundfunk y escribió obras de radio. Escribió su disertación en la Universidad de Tübingen sobre el escritor Franz Kafka.

Todos los reconocimientos y premios importantes que Walser recibió a lo largo de su larga vida como escritor incluyen el renombrado Premio Georg Büchner (1981), el ya mencionado Premio de la Paz de la Asociación de Libreros Alemanes (1998) y el Premio Internacional Friedrich Nietzsche, el cual recibió por el trabajo de su vida (2015).

En julio de 2022, Walser entregó su legado escrito al Archivo de Literatura Alemana en Marbach. Para su cumpleaños número 100, en 2027, Marbach está planeando una gran exposición del escritor. (rr)

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.

Translate »