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Durante el embarazo, debido a la descarga hormonal suele ser común que se lleguen a presentar algunos problemas estéticos, como: manchas, acné y la piel no luzca como antes. Si comienzas a notar que tu rostro está cambiando a medida que los meses de embarazo van pasando, lo mejor es consultar con un especialista antes de usar productos para combatir algunas de las irregularidades de nuestra piel.
No todos los cosméticos o cremas son idóneos para todas las mujeres, existen cosméticos prohibidos en el embarazo como retinol, ácido salicílico, peróxido de benzoilo, que a veces no funcionan o nos empeora el cutis, por lo que debemos consultar primero a un profesional y que revise los componentes para que nos asegure que contiene todo lo esencial durante el embarazo. Además, si sigues una serie de consejos para el cuidado del rostro en el embarazo, seguro que notarás los cambios en poco tiempo.
Limpiar bien el rostro por la mañana y la noche con una loción suave que refresque, humedezca la piel del rostro y nos limpie. De nuevo, es mejor verificar los componentes con un médico antes de su aplicación.
El acné puede afectar en menor o mayor medida, pero si aparece repentinamente lo mejor es acudir al dermatólogo para que nos ayude en conocer qué productos naturales o medicamentos son ideales para combatir el acné y aprender a cuidar el rostro en el embarazo. Así como controlar la hiperpigmentación debido a la melanina.
Si nos maquillamos en el embarazo a menudo debemos cuidar qué productos aportamos al cutis, pues los productos con alcohol y perfumados nos pueden causar alergias en la piel. No olvides que la cosmética natural puede ser tu mejor amiga en esta etapa.
La alimentación en el embarazo es una gran aliada. Si, normalmente, comemos mucha fruta y verdura, esto ayuda a que nuestro cutis luzca más saludable gracias a todas las vitaminas y propiedades que contienen estos alimentos. Vitaminas como la E o B5 ayudan a eliminar toxinas y reparar la piel contra ataques de agentes externos.
El sol, mucha precaución. Aunque en invierno es más llevadero un embarazo, lo cierto es que exponerse al sol es prácticamente habitual en todas las personas. Anota los consejos para tomar el sol embarazada y evitar los cambios de la piel. Si no te queda otra opción que salir bajo un sol un poco más fuerte, utiliza siempre protección solar alta para estar a salvo de que aparezcan manchas en el rostro.
En cuanto a los ojos, la retención de líquidos en el embarazo puede llevarnos a parecer más cansadas y a que nuestros ojos se hinchen, por lo que la mejor forma de reducir esos síntomas es beber mucha agua, disminuir o evitar la cafeína y colocarse de vez en cuando algodones con manzanilla en los párpados para contrarrestar la hinchazón.
