Last Updated on septiembre 30, 2025 by Deutsche Welle
El Gabinete de Friedrich Merz celebra su primera reunión a puerta cerrada en medio de tensiones internas y malos resultados en sondeos. ¿Cuáles son los principales desafíos que enfrenta el canciller alemán?La satisfacción en Alemania con el Gobierno de coalición, formado por los partidos conservadores CDUy CSU y los socialdemócratas del SPD, ha caído a mínimos históricos apenas cinco meses después de su toma de posesión: solo el 22 por ciento de los encuestados en la última encuesta de se mostraron satisfechos con el Gobierno lideradoi por el canciller federal, Friedrich Merz. El gabinete se reúne este lunes (29.09.2025) en la residencia Villa Borsig, en Berlín. Estos podrían ser algunos de los temas a tratar. Desconfianza tras la elección fallida de jueces El clima en la coalición fue tenso en algunos momentos. Esto también se puso de manifiesto en la elección de los nuevos jueces constitucionales. Aunque el Bundestag, el Parlamento alemán, ha elegido ahora a tres nuevos jueces -dos mujeres y un hombre- para el Tribunal Constitucional Federal, con la mayoría de dos tercios necesaria, lo ha hecho en un segundo intento. En julio, la elección no se llevó a cabo después de que el grupo parlamentario de la Unión, formado por la CDU y la CSU, expresara sus reservas sobre la candidata nominada por el SPD, Frauke Brosius-Gersdorf. Presupuesto estatal sobrecargado En política financiera hay toda una serie de puntos conflictivos, empezando por el presupuesto estatal. El canciller Merz se vio desacreditado ante muchos de sus votantes cuando, con la mayoría del antiguo Bundestag, relajó el freno al endeudamiento, al que había defendido durante la campaña electoral. Ahora, el presupuesto dispone de enormes sumas financiadas con créditos para inversiones en infraestructura y defensa. Pero, en primer lugar, la credibilidad de Merz ante su electorado se ha visto afectada y, en segundo lugar, el Estado debe pagar intereses cada vez más altos por la elevada deuda adicional, lo que limita el gasto. Por ello, el bloque conservador de la CDU y la CSU presionan para que se ahorre, mientras que el SPD apuesta sobre todo por aumentar los ingresos, es decir, por subir los impuestos. ¿Subir o bajar los impuestos? Esto lleva a un tema de debate clásico entre la Unión y los socialdemócratas. El SPD está a favor de aumentar los impuestos sobre el patrimonio, las herencias y los ingresos elevados, con el fin de proporcionar más ingresos al Estado, que sigue estando en apuros, pero también por razones relacionadas con la justicia social. La CDU y la CSU rechazan prácticamente todas las subidas de impuestos por considerarlas perjudiciales para la economía. El “Bürgergeld” ya no se llamará así La CDU y la CSU se muestran contrarios al nombre “Bürgergeld” (renta ciudadana). El término se introdujo en 2023 bajo el Gobierno federal liderado por el SPD para referirse a la prestación básica para personas desempleadas. En opinión de los partidos conservadores, la expresión Bürgergeld sugiere que todo el mundo tiene derecho a recibir ayudas estatales, y que la presión estatal para que los desempleados acepten los trabajos que se les ofrecen es demasiado leve. La CDU también señala que casi la mitad de los beneficiarios del subsidio ciudadano son ciudadanos extranjeros. El SPD, por su parte, no cree que haya un abuso sistemático de las ayudas, y se opone a recortes drásticos y al endurecimiento de los requisitos. Sin embargo, ambas partes coinciden en que hay que combatir el fraude organizado en relación con el subsidio ciudadano, cosa que la Agencia Federal de Empleo ha denunciado numerosos casos bajo sospecha. La seguridad social bajo presión Todas las partes implicadas tienen claro que el envejecimiento de la población, con cada vez más jubilados y menos cotizantes, hace necesario introducir cambios en las jubilaciones. La Unión tiende a querer ahorrar en las pensiones, por ejemplo, aumentando la edad de jubilación, mientras que el SPD prefiere garantizar el nivel del ingreso de los jubilados. Las reformas en torno a la migración Los buenos resultados electorales y en las encuestas del partido de ultraderecha AfD, crítico con la inmigración, reflejan regularmente que muchas personas en Alemania quieren limitar la llegada de inmigrantes. Esto también figura como objetivo en el acuerdo de coalición. Mientras tanto, se controlan las fronteras alemanas y se rechaza allí a solicitantes de asilo. Según el ministro del Interior de la CSU, Alexander Dobrindt, esto ha provocado un fuerte descenso de la “migración ilegal”. El SPD solo apoya estas medidas con grandes reservas. En general, las diferencias entre la CDU/CSU y el SPD en materia de migración son más bien de tono y matices. Todos saben que están bajo presión para obtener resultados en este ámbito. Servicio militar: ¿voluntario u obligatorio? Otros de los retos clave que enfrenta el Gobierno alemán es el cambio en cuanto al servicio militar, que, según el ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius, sería, en primera instancia, un llamado a prestar servicio voluntario. Sin embargo, de no cubrir las necesidades del Ejército alemán, se haría obligatorio, aseguró Pistorius. (gg/cp)