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Irán ha retirado sorpresivamente su participación en la Feria del Libro de Fráncfort, alegando que el popular encuentro cultural había interferido en los asuntos internos de Irán. Los organizadores lo niegan.Numerosas editoriales nacionales e internacionales presentan sus novedades en la Feria del Libro de Fráncfort , que se celebra entre el 19 y el 23 de octubre de 2022. Pero este año no hay ni presencia iraní, ni rusa. Los organizadores ya excluyeron a Rusia en primavera debido a la guerra de agresión contra Ucrania.
Irán, por su parte, había aceptado participar en un principio, pero ahora se ha “retirado”, según un informe de la agencia estatal de noticias (IRNA). El país alega que los responsables de la Feria del Libro de Fráncfort habrían “interferido abiertamente en los asuntos internos de Irán”. Al parecer, los organizadores del popular encuentro literario habrían declarado en una carta que no podían garantizar la seguridad del stand nacional de la República Islámica de Irán. Además, habría habido problemas con la expedición de visados para la delegación iraní.
Reacción de la Feria del Libro de Fráncfort
Sin embargo, la Feria del Libro no ha confirmado esta versión. La responsable de prensa de la Feria del Libro de Fráncfort, Kathrin Grün, dijo a DW que habían estado en contacto “varias veces” con los responsables iraníes. En esas ocasiones, también expresaron “solidaridad con el movimiento de protesta en Irán” y que la seguridad estaba garantizada para todos los expositores de la Feria del Libro. Según la vocera, existe un concepto de seguridad integral: “Trabajamos estrechamente con el servicio de seguridad de la Feria de Fráncfort y la Policía. Durante todos los días de la feria, habrá un mayor número de policías en los pasillos, tanto de civil como de uniforme.”
De este modo, además de la seguridad del público en general, se garantizaría la protección de los autores discriminados, amenazados o perseguidos políticamente y de los políticos internacionales de alto nivel en la Feria del Libro de Fráncfort. La portavoz de prensa no quiso comentar la asignación de visados, ya que no está en manos de la Feria del Libro.
La muerte violenta de la joven kurda Mahsa Amini el 16 de septiembre de 2022 también causó horror en la Feria del Libro de Fráncfort. Inmediatamente, la organización incluyó en su programa un evento sobre las protestas en Irán. En colaboración con PEN Berlín, se celebrará una mesa redonda titulada “El levantamiento contra el régimen de los mulás y lo que puede hacer el resto del mundo”.
Desde la muerte de Mahsa Amini, quien, según la organización de derechos humanos Amnistía Internacional, falleció “presumiblemente como consecuencia de violencia policial”, miles de personas protestan en Irán contra los valores tradicionales y las leyes religiosas. El régimen se defiende con todas sus fuerzas y trata de sofocar las protestas con violencia. Según Amnistía, solo hasta el 3 de octubre las fuerzas de seguridad habían matado a 144 personas, entre ellas al menos 23 niños.
Mejor invitar que excluir
El informe de la agencia de noticias iraní insinúa que la presencia de la delegación iraní en la Feria del Libro de Fráncfort no era deseada. Pero el evento cultural alemán ha demostrado en el pasado que no excluye, sino que quiere dar espacio a todas las voces. En los últimos años, ha tenido que soportar muchas críticas porque, por ejemplo, también permite que las editoriales de derechas presenten allí sus libros.
“Debemos escuchar todas las voces, en la medida en que no infrinjan la ley, y darles la oportunidad de ser escuchadas”, dijo el presidente y director general de la Feria del Libro de Fráncfort, Jürgen Boos, en una reciente entrevista en el diario Frankfurter Rundschau. Esto también explica que países con gobiernos autocráticos como China, Turquía, Omán, Hungría o Siria estén representados en la feria con sus propios stands.
(gg/ms)
